La protesta de los aficionados de la Sampdoria continúa tras el descenso a la Serie C, el primero en la historia del club genovés, ocurrido al final de la última jornada del campeonato. La noche pasada hubo momentos de tensión en la casa de Mbaye Niang, el delantero que llegó en enero para intentar mejorar la situación de los `blucerchiati`, sin éxito a pesar de un buen comienzo.
Al ex jugador de Milan y Genoa se le señala especialmente la clara oportunidad desperdiciada en el partido contra la Juve Stabia en la última jornada, que habría permitido a la Sampdoria alcanzar los `play out` y luchar por la salvación en el desempate.
Según los informes, la noche del miércoles, algunos seguidores de la Sampdoria habrían hecho explotar un petardo y encendido varias bengalas cerca de la casa del atacante, quien se encontraba en compañía de otro jugador del equipo, Rolando Vieira. Los manifestantes se dispersaron antes de la llegada de la policía y la Digos. Una protesta de pocos minutos y sin consecuencias físicas directas, como se ha informado, pero que generó tensión y susto a los dos futbolistas `blucerchiati`. Este incidente es un termómetro de la situación que se vive en la parte `blucerchiata` de la capital de Liguria, y en particular entre la afición `doriana`, tras un descenso que se veía venir en los últimos meses, pero que todos esperaban poder evitar dada la complicada situación en la clasificación.