Todd Boehly ha restado importancia a las protestas de los aficionados contra él y sus socios propietarios del Chelsea, insistiendo en que la desaprobación dirigida hacia él en las últimas semanas es ‘algo común’.
Los aficionados dejaron clara su insatisfacción con Clearlake Capital, Boehly y Behdad Eghbali el martes por la noche cuando se estima que 200 de ellos se reunieron fuera de Stamford Bridge antes de la victoria de su equipo por 4-0 sobre el Southampton. Boehly fue fotografiado en una pancarta agarrando un fajo de billetes en medio de quejas sobre sus vínculos con el revendedor de entradas Vivid Seats, mientras que otra pancarta acusaba al vehículo de propiedad BlueCo de crímenes contra el Chelsea.
También hubo cánticos para Roman Abramovich, quien vendió el Chelsea al consorcio en el verano de 2022 después de ser sancionado por el gobierno británico a raíz de la invasión rusa de Ucrania. Sus casi dos décadas de propiedad trajeron un éxito notable al oeste de Londres, especialmente en forma de dos títulos de la Liga de Campeones, y los grandes honores han eludido al club desde el cambio de propiedad.
Cuando se le preguntó cómo se sentía al escuchar a los aficionados cantar por Abramovich, cuyo mandato ha sido objeto de escrutinio desde su partida, Boehly dijo en la Cumbre de Negocios de Fútbol del Financial Times: ‘Creo que es algo común. La realidad es que cuanto antes aprendas que no vas a contentar a toda la gente todo el tiempo, la libertad aparece a partir de eso’.
‘Simplemente estás tratando de seguir un plan, ejecutar un plan, reconociendo que las cosas no son lineales, pero mientras estés tendiendo en la dirección correcta en general, te sientes mejor. La tendencia está en la dirección correcta y eso es lo que realmente importa. En junio serán tres años, eso no es mucho tiempo, especialmente en una industria donde hay tan poco tiempo de inactividad.
‘Para mí, creo que es una curva de aprendizaje pronunciada, pero eso también es algo bueno.
‘Lo más incomprendido es que estamos pensando en ello medido en años. Tienes que pensar a corto y largo plazo. Estamos enfocados en la combinación de ambos y buscando la mejor manera posible de ejecutar eso. Es un acto de equilibrio para descubrir cómo hacerlo. Los delanteros son difíciles de encontrar. No vas al supermercado y consigues un delantero’.
Boehly y sus socios propietarios se han ganado la reputación de perturbar las normas del mercado en su breve propiedad del Chelsea, especialmente explotando una laguna en las reglas de la Premier League que les permitió amortizar los contratos de adquisiciones de alto perfil como Enzo Fernández mucho más allá de la norma de cinco años. El hombre de 51 años reconoció que había habido una ventaja financiera en ello, pero habló de los largos contratos que se estaban entregando en términos de construir un equipo, y líderes, para el largo plazo.
‘Siempre estás enfocado en cómo mantener algo unido durante mucho tiempo’, dijo Boehly. ‘Eso se convierte en una opción que estás tratando de cultivar. Identificas lo que crees que son una serie de jugadores que se juntan y van a ser consistentes, confiables y juntos durante mucho tiempo, o tienen el potencial de serlo.
‘Cuando piensas en los contratos aquí, tienes que reconocer que un contrato de siete años es realmente un contrato de cinco años. El noventa y cinco por ciento de las veces vas a tener que tomar la decisión o te disparas en el pie. O puedes llegar a un acuerdo y acordar una extensión o hay pastos más verdes por ahí. Esa es la realidad del modelo. Si niegas eso, te estás engañando a ti mismo.
‘Pensamos que los contratos más largos, no solo nos permitían amortizar, lo cual era un buen beneficio secundario, sino que lo que realmente estábamos pensando era en cómo armar un equipo que tuviera la capacidad de permanecer unido. Si piensas en los equipos que son las dinastías a lo largo de los años, tenían capitanes superestrellas que realmente los lideraban. Lo que estás tratando de encontrar es cómo encuentro a ese capitán superestrella’.
Aunque Boehly ofreció una evaluación confiada de la posición y el plan de su equipo, aunque reconoció que en el campo ‘diciembre fue el pico’, no todo ha sido color de rosa en los pasillos del poder en Stamford Bridge. Boehly y Eghbali han albergado ambiciones de comprarse el uno al otro y cuando se le preguntó si la estructura de propiedad sería la misma en 12 meses, todo lo que el primero diría es: ‘No puedo predecir el futuro’. Preguntado directamente sobre las relaciones entre los propietarios, Boehly insistió en que había habido exageración en los informes y añadió: ‘Hemos acordado una estrategia, hemos acordado un camino a seguir’.
Boehly también tiene sus propias ideas para una visión más amplia de la Premier League, sugiriendo que a los clubes se les debería otorgar una parte en la competición por cada temporada de su participación y deberían mantenerla en caso de descenso. En cuanto a su propio club, cree que ya se han hecho progresos.
‘Si observas los cimientos que se están construyendo: un nuevo equipo de gestión, un nuevo liderazgo de la academia, un nuevo liderazgo de directores, una nueva mentalidad de jugador, esas cosas son todas evidentes y están ahí. Ahora se trata de cómo seguir cultivando el equipo con la idea de que siempre vas a intentar mejorar.
‘Si miras a los Dodgers [de los que Boehly es copropietario], ganamos la Serie Mundial el año pasado y tuvimos una pretemporada increíble. No puedes descansar si realmente quieres construir algo que sea lo mejor. Incluso si estás construyendo lo mejor, ¿cuáles son tus probabilidades de ganarlo todo cada año?’
